martes, 10 de noviembre de 2009

Reflexión número 173

Por Jorge Carriles

Si no demandamos que la gente mantenga altos rendimientos para permanecer en el equipo (de trabajo, deportivo, familiar), ¿por qué habrían de estar orgullosos ellos de pertenecer a él? Los esfuerzos muy fuertes crean orgullo porque las personas que los sobreviven saben que son un grupo selecto. No tengamos miedo de ser exclusivos.
____________________________________________

No hay comentarios: